INTRODUCCIÓN
Es conocido que las características morfológicas y fisiológicas del cultivo de la piña le permiten bajo las condiciones climáticas características de Cuba garantizar determinados niveles de producción sin el empleo del riego o con la aplicación de niveles limitados de agua.
Los principales países productores de esta fruta utilizan el riego como vía para suplir el déficit de humedad cuando las lluvias no son suficientes o están mal repartidas, lo cual es característico de las zonas tropicales y sub tropicales en las que se concentra la producción.
En Cuba durante muchos años la actividad de riego no estuvo contemplada en los programas de producción de este cultivo, en estudios realizados durante la década del 80 se demostró que a pesar de su alta resistencia a la sequía responde positivamente al riego según Bonet et al. (2015) y Bonet (2016); de estos resultados se derivaron las posteriores inversiones en tecnología de riego en las grandes áreas dedicadas a su producción en la provincia Ciego de Ávila.
A partir de ese momento el riego se ha aplicado en las plantaciones de piña de esta provincia de forma inestable empleando diversas tecnologías.
Según estudio realizado con el cultivar Española Roja en Ciego de Ávila por Bonet (2016), se demostró que la evapotranspiración del cultivo fue menor de 3 mm d-1, alcanzando el máximo valor durante la etapa fisiológica de floración y desarrollo del fruto.
El efecto del agua sobre el cultivo se refleja no solo en el desarrollo de la plantación sino también en el rendimiento del cultivo según Bonet y Guerrero (2012); obteniendo una alta relación del rendimiento con la evapotranspiración y el agua aplicada por riego (Bonet et al., 2010, 2014).
A pesar de estos resultados, en diversos escenarios se ha mantenido el criterio de que dada la baja evapotranspiración del cultivo de la piña y su alta resistencia a la sequía, no se justifica económicamente la aplicación del riego; durante el estudio del efecto del agua en el rendimiento del cultivo quedó demostrada la relación existente entre ambos parámetros, interesa entonces valorar los criterios económicos sobre la producción de piña con diferentes alternativas de manejo del agua de riego e incluso sin empleo del riego aprovechando las características climáticas de Cuba que garantizan un nivel medio de precipitaciones superior a los 1200 mm anuales.El objetivo de este trabajo es valorar el efecto económico del riego en el cultivo de la piña.
MÉTODOS
Con vistas a tener un criterio económico sobre la factibilidad del riego en este cultivo se determinan la rentabilidad y el tiempo de recuperación de la inversión, se comparan diferentes variantes de manejo del agua, incluyendo la producción en condiciones de secano, para ello se utiliza la información de partida disponible respecto al agua consumida y la producción obtenida durante la fase experimental de estudio de la ETc de la piña en la provincia Ciego de Ávila (Bonet, 2016). La evaluación se realiza según los criterios de Baca (1993) citado por Brown (2000).
Para la realización de los cálculos se utilizan las siguientes ecuaciones:
Cr
-Costo del riego ($/ha);
Csr
-Costo del sistema de riego ($/ha);
Ci
-Costo de instalación del sistema de riego ($/ha);
Co
-Costo de operación del sistema de riego ($/ha);
Cm
-Costo de mantenimiento del sistema de riego ($/ha);
Ca
-Costo de amortización del sistema de riego ($/ha);
Bb
-Beneficio bruto marginal ($ ha-1);
Re
-Rendimiento esperado (t/ha);
Pe
-Precio esperado ($/t);
In
-Ingreso neto anual ($ ha-1);
CT
-Costo total anual ($ ha-1);
Cc
-Costo de producción anual del cultivo sin riego ($ ha-1);
TRI
-Tiempo de recuperación de la inversión (años);
RF
-Rentabilidad financiera;
UNDI
-Utilidades netas después de impuestos ($ ha-1);
I
-Inversión inicial ($ ha-1);
RI
-Rendimiento de la inversión;
Iu
-Impuesto sobre utilidades (%);
B/C
-Relación beneficio costo.
Se utilizó como información base los resultados sobre el rendimiento del cultivo ante diferentes condiciones de aseguramiento de agua, así como su composición por calidades según la norma NC 7726:12 (2012), obtenidos en condiciones experimentales (Bonet, 2016). En las Tablas 1 y 2 se reflejan los resultados.
TABLA 1.
Rendimiento en áreas de riego
Variante | Nivel de aseguramiento de agua de riego (%) | Rendimiento Potencial (t ha-1) |
---|---|---|
80% Wmax | 100 | 92,0 |
70% Wmax | 65 | 82,8 |
Sin riego | 0 | 64,4 |
TABLA 2.
Composición de la producción por categoría de calidad durante la fase experimental de estudio de la ETc de la piña en la provincia Ciego de Ávila
Para el cálculo del costo total del riego se dispone de la siguiente información:
Costos de producción, calculados para tres ciclos de producción considerando que los aspectos referidos a la semilla y la siembra sólo se efectúan al inicio del proceso productivo
Costo del sistema de riego (IAgric, 2009a, 2009b).
Costos de instalación (trazado, excavación, montaje, prueba hidráulica y rehincho).
Costos de operación, determinados a partir del régimen de riego calculado para los suelos predominantes en las áreas de piña en la provincia.
Eficiencia del sistema de riego: 80%
Intensidad de lluvia del sistema de riego por aspersión empleado: 5,0 mm·h-1
Tarifa de cobro de electricidad y costo del agua (Cuba-Ministerio de Finanzas y Precios, 2012).
Con el precio de venta establecido para las distintas categorías según la Gaceta Oficial de la República de Cuba (2016), se calcula el precio esperado de la producción y considerando el rendimiento potencial según Bonet (2016), se obtiene el valor de la producción.
Los cálculos han sido elaborados en base a una programación de riego para un año medio en las condiciones de la provincia Ciego de Ávila.
Para el desarrollo del trabajo se utilizan los siguientes Software: Microsoft Office Word 2007, Microsoft Office Excel 2007, Corel Graphics Suite 11, Map Info Professional 9.0 y Auto CAD 2007, así como el programa estadístico Visor SPSS (11.5).
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
En la Tabla 3 se refleja el Beneficio bruto marginal en diferentes alternativas de manejo del riego.
TABLA 3.
Beneficio bruto obtenido en diferentes alternativas de manejo del agua
Variante | Rendimiento esperado (t ha-1) | Precio esperado ($ t-1) | Beneficio bruto marginal ($ ha-1) |
---|---|---|---|
80% W máx. | 92,0 | 2738,15 | 251 910,00 |
70% W máx. | 82,8 | 2703,50 | 223 849,80 |
Sin riego | 64,4 | 2615,40 | 168 431,76 |
Con la información disponible se determinó el número de horas de riego durante los tres ciclos, con lo cual se calcularon los gastos por el consumo de agua, electricidad y salarios. Considerando las características del sistema de riego y las normas del Minag (2006), se asumió el periodo de vida útil, con lo cual resultan índices de 6,7% para la amortización y del 1% para el mantenimiento respectivamente (Tabla 4).
TABLA 4.
Costos totales ($ ha-1) en diferentes alternativas de manejo del agua
La Figura 1 refleja el ingreso neto resultante de la aplicación del riego. Se observa que al garantizar la máxima demanda hídrica del cultivo durante todo su ciclo se obtiene el mayor beneficio económico lo cual está dado tanto por el incremento de los rendimientos como por una mejor composición de calidades, sin embargo, la aplicación del riego limitado e incluso la producción en condiciones de secano produce también resultados satisfactorios, resultado que se justifica por la capacidad de este cultivo de resistir períodos de sequía y su baja evapotranspiración, así como por las condiciones climáticas del país que garantizan un alto régimen de precipitaciones durante varios meses del año (Bonet y Guerrero, 2016).
FIGURA 1.
Ingreso neto en diferentes alternativas de manejo del agua ($ ha-1).
Estos resultados indican que en un ciclo del cultivo (3 cosechas) se recupera la inversión de riego, con los valores más favorables en la variante de total satisfacción de la demanda hídrica del cultivo.
Al comparar los criterios de manejo del agua se obtienen los resultados mostrados en la Tabla 5.
TABLA 5.
Comparación económicaen variantes de manejo del agua en el cultivo de la piña
Para la determinación del impuesto sobre utilidades se utilizó un índice de 0,75 (ONAT (Oficina Nacional Administración Tributaria), 2012). Los resultados confirman la efectividad económica de la respuesta del cultivo al riego; en las dos alternativas de manejo del agua los resultados son satisfactorios, pero se observa que al garantizar la máxima demanda hídrica del cultivo durante todo su ciclo se obtiene el mayor beneficio económico.
Estos resultados se reflejan en una mayor productividad del agua, reflejo de la efectiva relación agua rendimiento en este cultivo, resultado que coincide con otros cultivos estudiados en las condiciones de Cuba según (González et al., 2013), sin embargo, la aplicación del riego limitado e incluso la producción en condiciones de secano produce también resultados satisfactorios, resultado que se justifica por la capacidad de este cultivo de resistir períodos de sequía y su baja evapotranspiración según Segura (2008), así como por las condiciones climáticas del país que garantizan un alto régimen de precipitaciones durante varios meses del año.
El número de riegos calculado para la garantía de la demanda de agua de la piña en los tres ciclos osciló entre 89 y 95 para los tres tipos de suelos predominantes en las áreas dedicadas al cultivo (Figura 2).
FIGURA 2.
Número de riegos aplicados al cultivo durante los tres ciclos.
Con el valor medio de una serie de 20 años de precipitaciones en las áreas de estudio se calculó la lluvia aprovechable, obteniéndose un valor anual de 725,6 mm, lo cual justifica el criterio de su utilización para la evaluación de las necesidades de riego en el cultivo de la piña; esto confirma las posibilidades de este cultivo de garantizar determinados niveles de producción aún en condiciones de sequía si se logra un manejo adecuado del agua según Bonet et al. (2013); en este sentido tiene especial significación el tratamiento a las plántulas de piña obtenidas mediante reproducción in vitro, por cuanto se ha demostrado que mediante una efectiva preparación durante la fase de aclimatización, las plantas logran adaptarse mejor a condiciones de sequía una vez trasladadas a plantación (Rodríguez et al., 2016a, 2016b).
Reportes presentados por los autores Bonet et al. (2014), manifiestan la eficiencia de uso del agua de este cultivo, lo cual unido a los resultados de la evaluación económica permiten diagnosticar variantes de manejo del riego en condiciones de limitaciones en el suministro de agua como las que se pueden pronosticar para el futuro por los efectos esperados del cambio climático según Planos, 2014 y Duarte et al., 2017), en la medida en que el año sea más seco mayor será la diferencia entre un régimen de riego óptimo y un riego limitado.
Debe considerarse además el beneficio económico adicional que representa para el productor nacional el hecho de que la disponibilidad de sistemas de riego le permite, aprovechando la compatibilidad del clima con las exigencias del cultivo, efectuar siembras durante todo el año sin depender de la lluvia. Los resultados justifican la aplicación de una programación de riego deficitario controlado en el cultivo de la piña a partir de:
Garantizar la máxima demanda del cultivo durante las etapas de establecimiento, floración y formación del fruto.
Durante las etapas de desarrollo vegetativo y cosecha puede adecuarse la programación del riego, procurando mantener el balance de humedad sobre el 70% CC, para lo cual debe hacerse una utilización eficiente de la lluvia.
Una práctica recomendable durante el riego de la piña es la utilización del mulch con vistas a reducir los índices de evaporación desde la superficie del suelo.